Es de textura parecida al flan pero con un toque más gelatinoso.
En este caso, acompaño la Panna Cotta con un sirope de frutas del bosque ya que la acidez que aporta, combina perfectamente con el tono dulce de este postre, obteniendo así una fusión de sabores a mi parecer deliciosa.
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
- 400 gr. de nata líquida.
- 100 ml. de leche entera.
- 3 láminas de gelatina.
- 50 gr. de azúcar.
- 1 vaina de vainilla en rama.
- 4 cucharadas soperas de mermelada de frutas del bosque y una cucharada de agua (para el sirope).
ELABORACIÓN:
1) Ponemos las 3 láminas de gelatina en remojo (el agua debe estar fría).
2) Mientras tanto llevamos a ebullición la nata, la leche y la vainilla en una olla pequeña.
3) Cuando alcanzamos el punto de ebullición, ponemos a fuego medio y removemos para evitar que se pegue durante 5 minutos.
4) Apartamos la olla del fuego, retiramos la vaina de vainilla y añadimos el azúcar y las placas de gelatina que teniamos en remojo escurridas. Removemos hasta que la gelatina y el azúcar se hayan disuelto por completo.
5) A continuación ponemos la mezcla en 4 recipientes o moldes y dejamos a temperatura ambiente durante 30 minutos, para después colocarlos en la nevera un mínimo de tres horas.
Yo utilizo moldes de silicona porque es más fácil desmoldar a la hora de servir.
6) Para acompañar la Panna Cotta, yo lo que hago es mezclar 4 cucharadas soperas de mermelada y una de agua en un cazo pequeño, y posteriormente se lleva a ebullición sin parar de mover.
7) Retiramos el cazo del fuego y con la ayuda de un colador, colamos la mezcla para obtener el sirope que utilizaremos para acompañar nuestra Panna Cotta. Cuando se enfríe lo ponemos en la nevera también hasta el momento de la presentación.
¡Espero que os guste este fantástico postre!
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